Permitiría a los agricultores minimizar su uso de agua y reducir el escurrimiento de contaminantes
Rodos los días se usan miles de millones de galones de agua dulce para regar los cultivos, pero muchos de ellos se desperdician en plantas ya maduras o que mueren.
Ahora, los investigadores han utilizado imágenes capturadas por un vehículo aéreo no tripulado (UAV) - es decir, un drone - para mapear campos de cebada y determinar qué filas de plantas necesitan más agua.
El equipo montó en un UAV accionado por batería cámaras sensibles a la luz visual e infrarroja para recoger información óptica y térmica y voló el drone 90 metros por encima de los campos en Dinamarca.
Con la imágenes aéreas, obtenidas en la primavera y el verano, los investigadores midieron el verdor y la temperatura de las plantas de cebada (la temperatura refleja el contenido de agua en las inmediaciones de aire y suelo) y calcularon el nivel de estrés de agua de cada área de 25 por 25 centímetros de campo, según informa el mes pasado Biogeosciences.
Los investigadores validaron sus resultados usando mediciones del contenido de agua del suelo obtenidas directamente de los campos, y mostraron que sus observaciones en el aire podían diferenciar fiablemente entre cultivos maduros - que necesitan menos agua - y cultivos no maduros.
Mapas de estrés hídrico como estos pueden identificar las plantas más necesitadas de riego, lo que potencialmente permitiría a los agricultores minimizar su uso de agua y reducir el escurrimiento de contaminantes.